Jugos que Curan - Jugos de Frutas que Curan Enfermedades!

Jugos que Curan Enfermedades.

La terapia de jugo crudo es un método para el tratamiento de enfermedades a través de una dieta exclusiva de jugos de frutas y verduras.

Jugos que Curan

También se conoce como el jugo de ayuno. Esta es la forma más eficaz para restaurar la salud, rejuvenecer y desintoxicar el cuerpo.

Para beneficiarse realmente de las frutas y las verduras es aconsejable comprar un exprimidor eléctrico, para beber el jugo y garantizar que no haya pérdida de nutrientes.

Todas las verduras y las frutas comienzan a deteriorarse tan pronto como se cortan a través de la piel externa protectora.

Los jugos preparados tienen poco valor nutricional y la mayoría han añadido azúcar, edulcorantes artificiales y otros ingredientes para preservarlos o colorearlos, que no son saludables para el organismo humano.

Durante la terapia de jugo crudo, la capacidad de limpieza de los órganos, como los pulmones, el hígado, los riñones y la piel, incrementan en gran medida, y los residuos y toxinas metabólicas acumuladas se eliminan rápidamente. 

También permite que los órganos digestivos y asociados tomen un descanso. Después de tomar un jugo en ayunas, o hacer  la terapia de jugo crudo, la digestión de los alimentos y la utilización de los nutrientes es mucho mayor.

Los jugos específicos son beneficiosos para las condiciones específicas, pero en general, la fruta cruda o de hortalizas, revitalizan y rejuvenecen de manera extraordinaria a todos los órganos, glándulas y funciones del cuerpo.

También se puede tomar jugos crudos junto con una dieta saludable normal, para proporcionar todas las vitaminas y nutrientes necesarios para recuperar y ser protegidos de muchas enfermedades e infecciones.

Beneficios del jugo crudo.

El efecto favorable de los jugos crudos en el tratamiento de la enfermedad se atribuye a los siguientes hechos:

Los jugos crudos de frutas y vegetales son muy ricos en vitaminas, minerales, oligoelementos, enzimas y azúcares naturales.

Ellos ejercen efectos beneficiosos en la normalización de todas las funciones del cuerpo.

Suministran los elementos necesarios para la actividad de curación y la regeneración celular propia del cuerpo, acelerando así la recuperación.

Los jugos extraídos de frutas y verduras crudas no requieren digestión y casi todos sus nutrientes vitales son asimilados directamente en el torrente sanguíneo.

Los jugos crudos son extremadamente ricos en elementos alcalinos. Esto es muy beneficioso para normalizar el equilibrio ácido-alcalino en la sangre y en los tejidos, ya que es el exceso de acidez, la mayoría de los factores de una mala salud.

Tienen una generosa cantidad de minerales orgánicos de fácil absorción, especialmente el calcio, potasio y silicio, que ayuda a restablecer el equilibrio bioquímico y mineral en los tejidos y las células, evitando de este modo el envejecimiento prematuro de las células y las enfermedades.

Los jugos crudos contienen ciertas medicinas naturales, hormonas vegetales y antibióticos. Por ejemplo, se dice que las judías verdes contienen una sustancia similar a la insulina.

Ciertas hormonas necesarias por el páncreas para producir insulina están presentes en los zumos de pepino y cebolla. Los jugos frescos de ajo, cebollas, rábanos y tomates contienen sustancias antibióticas.

Todas las recetas de jugo pueden hacerse como batidos, con una licuadora añadiendo un vaso de agua a la mezcla. Evidentemente las cáscaras duras deben ser removidas antes de la mezcla, pero no hay necesidad de quitar las pieles blandas comestibles en las manzanas, peras y otras frutas similares.

La naranja, mandarina y la cáscara de limón están llenos de nutrientes y también puede ser incluidos. La adición de un vaso frío de té verde o de hierbas en lugar de agua proporciona un beneficio aún más nutritivo.

JUGOS QUE CURAN ENFERMEDADES.

En algunos jugos de frutas y verduras, se ha encontrado que son beneficiosos en el tratamiento de ciertas enfermedades y dolencias:

La Acidez: manzana, aguacate, plátano, zanahoria, uva, pera, Mosambi, naranja y espinacas.

Acné: zanahoria, pepino, uva, pera, ciruela, papa, rábano, espinaca y tomate.

Alergias: albaricoque, remolacha, zanahoria, jengibre, uva y espinacas.

Arteriosclerosis: manzana, remolacha, arándanos, zanahoria, apio, pomelo, jengibre, uvas (negras o rojas), piña, limón, lechuga, granada, espinacas y berros.

Anemia: albaricoque, plátano, remolacha, zanahoria, apio, fresa, espinacas y berros.

Artritis: Manzana (agria), aguacate, remolacha, zanahoria, cerezas (agria), pepino, pomelo, limón, lechuga, papaya, piña, espinacas y berros.

Asma: manzana, albaricoque, zanahoria, apio, limón, piña, melocotón, rábano y fresa.

Bronquitis y trastornos respiratorios: manzana, albaricoque, zanahoria, fruta de kiwi, limón, cebolla, piña, melocotón, fresa, espinaca y tomate.

Trastornos de vejiga y riñón: manzana, albaricoque, arándanos, zanahoria, apio, arándanos, pepino, uvas, limón, perejil y berros.

Los resfriados: moras, zanahoria, apio, pomelo, limón, lima, kiwi, cebolla, naranja, piña, rábano, espinaca, berro y mandarina.

Estreñimiento:  manzana, plátano, remolacha, zanahoria, jengibre, uvas, limón, pera, ciruela, espinacas y berros.

Colitis: manzana, albaricoque, pera, melocotón, piña, papaya, zanahoria, remolacha, pepino y espinacas.

Cistitis: manzana, albaricoque, arándanos, zanahoria, apio, arándanos, pepino, uva, limón, perejil y berros.

Diabetes: brócoli, repollo, zanahoria, apio, cítricos, guayaba, lechuga, rábano, espinaca y berro.

Diarrea: el aguacate, zanahoria, apio, limón, papaya y piña.

Eczema: aguacate, remolacha, arándanos, zanahoria, pepino, uva (negras o rojas), espinacas y berros.

Epilepsia: zanahoria, apio, cilantro, uva (roja o negra), espinacas y berros.

Trastornos oculares: albaricoque, aguacate, arándanos, moras, arándanos, zanahoria, apio, arándanos, perejil, frambuesas, espinacas, fresas, tomates y berros.

La gota: remolacha, zanahoria, apio, cerezas (agria), pepino, piña, tomate y berros.

Halitosis: manzana, zanahoria, apio, pomelo, limón, perejil, piña, espinacas y tomate.

Hemorroides: zanahoria, limón, naranja, papaya, piña, espinacas, nabo y berro.

Dolor de cabeza y migraña: el aguacate, la zanahoria, las cerezas (agria), cilantro, uvas, limón, lechuga, papaya, piña, espinacas y berros.

Enfermedad del corazón: manzana, plátano, remolacha, zanahoria, pepino, jengibre, uvas (negras o rojas), el limón, la granada, espinacas y berros.

Presión arterial alta: plátano, remolacha, zanahoria, pepino, jengibre, uva, naranja y berros.

Influenza: albaricoque, mora, zanahoria, jengibre, pomelo, limón, cebolla, naranja, piña, rábano, espinaca y berro.

Insomnio: manzana, plátano, zanahoria, apio, cerezas (agria), cilantro, uva, limón, lechuga y tomate.

Ictericia y trastornos hepáticos: remolacha, zanahoria, arándano, pepino, jengibre, uvas, limón, papaya, pera, rábano, espinaca y tomate.

Trastornos menstruales: remolachas, cerezas (agria), jengibre, uvas, lechugas, ciruelas, espinacas, nabos y berros.

Los síntomas de la menopausia: albaricoque, plátano, remolacha, zanahoria, apio, uvas (negras o rojas), limón, papaya, ciruela, espinaca, fresa, tomate y berros.

Neuritis: manzana, aguacate, remolacha, arándanos, zanahoria, naranja, papaya, la piña, el rábano y el berro.

Obesidad: manzana, remolacha, repollo, zanahoria, apio, pomelo, limón, lechuga, naranja, piña, papaya, rábano, espinaca, mandarina, tomate y berros.

La pleuresía: manzana, zanahoria, arándano, uva, limón, lima, cebolla, naranja, papaya, piña, rábano, espinaca, fresa, mandarina y el tomate.

Neumonia: manzana, aguacate, kiwi, naranja, Mosambi, manzana, papaya, piña, ajo, rábano, uvas, zanahorias, tomates y mandarina.

Los problemas de la próstata: manzana, albaricoque, arándanos, limón, zanahoria, apio, pepino, perejil, berros, espárragos, lechugas y espinacas.

Psoriasis: manzana, albaricoque, remolacha, zanahoria, pepino, uva, limón y berros.

Reumatismo: remolacha, zanahoria, cerezas (agria), pepino, pomelo, uva, limón, naranja, papaya, piña, espinacas, tomate y berros.

Las úlceras estomacales: albaricoque, aguacate, repollo, zanahoria y uvas.

Sinusitis: albaricoque, zanahoria, jengibre, limón, cebolla, rábano y tomate.

Dolor de garganta: albaricoque, zanahoria, jengibre, uvas, limón, perejil, piña, ciruelas y tomates.

La amigdalitis: albaricoque, zanahoria, limón, jengibre, pomelo, naranja, piña, rábano, espinaca y berro.

Las venas varicosas: remolacha, zanahoria, jengibre, uva, naranja, ciruela, rábano, tomate, nabo y berro.

Jugos que Curan